La tribología, aunque desconocida para muchos, juega un papel crucial en nuestra vida diaria, desde los pequeños dispositivos mecánicos hasta las grandes máquinas industriales. Si alguna vez te has preguntado por qué las máquinas fallan por desgaste o cómo ciertos productos logran reducir la fricción para mejorar su rendimiento, ¡bienvenido al fascinante mundo de la tribología! En este artículo, exploraremos qué es la tribología, su historia, cómo se manifiestan el desgaste y la fricción, las estrategias para prevenir estos problemas, y cómo los lubricantes de grado alimenticio —como los ofrecidos por OKS— juegan un papel esencial en la industria alimentaria.
¿Qué es la Tribología?
La tribología es la ciencia que estudia la fricción, el desgaste y la lubricación de superficies en contacto y en movimiento. Aunque suene muy técnico, es algo que experimentamos todos los días. Desde los frenos de un coche hasta los engranajes de una máquina, la tribología está presente en cualquier interacción entre dos superficies que se mueven entre sí. El principal objetivo de la tribología es reducir la fricción y el desgaste para mejorar la eficiencia y prolongar la vida útil de los componentes.
Breve Historia de la Tribología
El concepto de tribología tiene raíces antiguas. Los egipcios ya utilizaban lubricantes primitivos, como aceites animales y vegetales, para facilitar el movimiento de los bloques de piedra durante la construcción de sus monumentos. Sin embargo, el término “tribología” fue acuñado formalmente en 1966 por el ingeniero Peter Jost, quien destacó la importancia de entender y aplicar esta ciencia para reducir el costo económico del desgaste y la fricción en la industria.
Desde entonces, la tribología se ha convertido en un campo fundamental en la ingeniería moderna, con aplicaciones en la automoción, aeronáutica, metalurgia, manufactura y, especialmente, en la industria de alimentos.
Desgaste y Fricción: ¿Qué Son y Cómo Ocurren?
Fricción es la resistencia que ocurre cuando dos superficies en contacto se mueven una sobre la otra. Aunque en algunos casos la fricción es deseada (como en el frenado de vehículos), en muchos otros es indeseable, ya que causa calor, pérdida de energía y desgaste.
El desgaste, por otro lado, se refiere al deterioro de las superficies debido a esa fricción. Existen diferentes tipos de desgaste, entre ellos:
- Desgaste abrasivo: Ocurre cuando partículas duras entre las superficies en movimiento erosionan el material.
- Desgaste adhesivo: Se produce cuando dos superficies tienden a unirse bajo presión y, al separarse, arrancan partículas de material.
- Desgaste corrosivo: La corrosión debida a la exposición a ambientes agresivos también puede contribuir al desgaste de los componentes.
¿Cómo Prevenir el Desgaste y la Fricción?
Prevenir el desgaste y la fricción es vital para optimizar el rendimiento de las máquinas y alargar su vida útil. Algunas estrategias clave incluyen:
- Uso de lubricantes adecuados: La lubricación reduce la fricción entre superficies y minimiza el contacto directo, lo que ayuda a evitar el desgaste. Existen lubricantes para diversas aplicaciones, desde aceites y grasas hasta lubricantes sólidos como el grafito.
- Superficies mejoradas: El uso de recubrimientos protectores o la elección de materiales con menor coeficiente de fricción puede reducir significativamente el desgaste.
- Mantenimiento regular: Monitorear y mantener adecuadamente los equipos ayuda a detectar problemas de desgaste antes de que causen fallas mayores.
- Diseño optimizado: Un buen diseño puede minimizar los puntos de contacto y las áreas de alta fricción, lo que contribuye a reducir el desgaste desde el principio.
Lubricantes de Grado Alimenticio: Clasificación NSF y OKS
En la industria alimentaria, donde las normas de seguridad son extremadamente estrictas, los lubricantes no solo deben ser efectivos en la reducción de fricción y desgaste, sino también seguros para el contacto incidental con alimentos. Aquí es donde entra en juego la clasificación NSF (National Sanitation Foundation) para los lubricantes de grado alimentario.
Clasificación NSF para Lubricantes de Grado Alimentario
La NSF establece diferentes categorías para los lubricantes utilizados en la industria de alimentos:
- NSF H1: Los lubricantes H1 son insípidos, inodoros, fisiológicamente inertes y son adecuados para el “contacto incidental y técnicamente inevitable con un producto alimenticio de hasta 10 ppm”. Se utilizan para maquinaria como bombas, cintas transportadoras y mezcladores y para aplicaciones como enlatado, mezcla, cocción, corte, rebanado, pelado, manipulación, embotellado y elaboración de cerveza. En las instalaciones donde se manipulan alimentos y bebidas, el uso de lubricantes registrados NSF H1 permite la eliminación de la posible contaminación. Las sustancias peligrosas dentro y alrededor de las aplicaciones de alimentos y bebidas pueden ser perjudiciales para la salud pública, por lo tanto, elegir un producto lubricante H1 de calidad no solo minimiza el riesgo de contaminación, sino que también garantiza la longevidad y el rendimiento de su equipo y maquinaria. Los lubricantes H1 son seguros para el consumo humano en pequeñas cantidades, muy pocas partes por millón, así que elija un lubricante H1 certificado por NSF de un fabricante de renombre.
- NSF H2: Los lubricantes H2 se consideran aptos para uso alimentario, pero no son productos específicamente seguros para los alimentos. Los lubricantes específicos para H2 son para maquinaria que no entra en contacto directo con alimentos, como una carretilla elevadora. Se utiliza en zonas donde no hay posibilidad de contacto directo con alimentos, bebidas o productos farmacéuticos. Los productos con certificación NSF H2 deben cumplir con estrictos parámetros toxicológicos y no pueden contener oligoelementos de “carcinógenos, mutágenos, teratógenos, ácidos minerales o metales pesados intencionales como antimonio, arsénico, cadmio, plomo, mercurio o selenio”.
- NSF A1: LDentro de las clasificaciones NSF este producto es aceptado para el uso general de limpieza con agentes limpiadores en todas las superficies, o se puede usar con instrumentos mecánicos de vapor o de limpiezas en todos los departamentos. Antes de usar este producto los alimentos y el material de empaque deben ser retirados del lugar o estar protegidos. Después de usar este producto, las superficies donde es usado deben ser enjuagadas con agua potable. El permiso para el uso de este producto en sitios de carga y otras áreas similares se deja a la discreción del inspector a cargo del área.
Estos lubricantes no solo cumplen con estrictos requisitos de seguridad, sino que también aseguran un excelente desempeño en cuanto a fricción, desgaste y resistencia a altas temperaturas.
OKS: Lubricantes de Alto Desempeño para la Industria Alimentaria
OKS, un fabricante líder en el mercado de lubricantes, ofrece una gama de productos especializados para la industria alimentaria. Estos lubricantes están formulados para cumplir con las regulaciones NSF, brindando seguridad y alto rendimiento en entornos donde el contacto con alimentos es una posibilidad. Algunos de los productos más destacados incluyen:
- OKS 476: Grasa lubricante NSF H1: Ideal para el uso en componentes de máquinas de procesamiento de alimentos. Ofrece excelente resistencia a la oxidación y al envejecimiento, además de proporcionar una barrera de protección eficaz contra el desgaste.
- OKS 3751: Aceite lubricante para cadenas NSF H1: Especialmente diseñado para ambientes con altas temperaturas, como hornos en la industria de panificación. Su formulación asegura una óptima lubricación sin riesgo para la salud.
- OKS 469: Lubricante para plásticos y elastómeros NSF H1: Para lubricación de combinaciones de plástico/plástico y plástico/metal, como p.ej. grifería unidireccional en la industria alimenticia o portavasos en la industria del automóvil
Conclusión
La tribología, aunque a menudo pasa desapercibida, es fundamental para mejorar la eficiencia y longevidad de las máquinas en prácticamente todos los sectores industriales, incluida la industria alimentaria. El control de la fricción y el desgaste, combinado con el uso de lubricantes adecuados y seguros para alimentos, como los productos de OKS, es esencial para mantener altos estándares de seguridad y rendimiento.
Con el conocimiento adecuado sobre fricción, desgaste y la correcta lubricación, puedes prolongar la vida útil de tus equipos, reducir costos de mantenimiento y garantizar la seguridad en ambientes sensibles como el procesamiento de alimentos. ¡Dale a tus máquinas el cuidado que merecen y asegúrate de que estén funcionando al máximo rendimiento!